
Uno se puede desenamorar de muchas cosas, aunque quizas la que mas duele, por culpa de la mediatizacion hollywoodiense sea la amorosa propiamente dicha.
¿Pero se puede uno desengañar de su trabajo, o de su vida en general? Quizas sean rachas y/o periodos de carencias oligoelementales del organismo, o mas bien etapas de autoconvencimiento y aceptacion, el caso es que cuando te alcanza el hastio... eres incapaz de volver a donde estabas y necesitas el cambio.
Si Mathematikom, me lo estoy planteando, pero estoy demasiado atado.

1 comentario:
No sé si llegaste a leer el libro de García Márquez, o simplemente has visto la película a la que hace un guiño el nombre del post.
Es una historia de amor, y también desamor, claro está porque inevitablemente las dos cosas están ligadas... si algo desenamora es proque algún día llegó a enamorar... luego lo que era fuego ardiente se han convertido en carboncillos. ¿Podrán esos carboncillos volver al convertirse en ascuas o pasarán a ser cenizas?
Bueno, lo importante es que el que se desenamora, encuentre algo para poder enamorarse nuevamente, y no tiene porque ser otra vez lo mismo, está claro.
Así que ya sabes... si el COD ha dejado de ilusionarte, prueba otro shooter XDD
Publicar un comentario